Esta mañana, cuando la seño nos estaba explicando las cosas que íbamos a hacer durante el dia, nos ha contado que después del recreo íbamos a pintar con pincel granos de uva para hacer un racimo gigante.
Nos ha preguntado qué color deberíamos utilizar y como ayer hicimos mosto hemos recordado que las uvas eran muy oscuras y el mosto era de color MORADO.
Entonces se nos ha planteado un problema ya que tenemos pintura de muchos colores, pero morado no ¿Qué podemos hacer? Pues tras mucho pensar, Julia ha recordado que si mezclas el amarillo con el azul te sale verde, así que debemos probar mezclando colores hasta que consigamos el color morado.
De este modo, tras el recreo la seño Marta ha aparecido con tres botes de tempera de colores amarillo, azul y magenta, una paleta de pintor y un pincel.
Aquí ha comenzado el experimento: Iván, que era el maquinista, ha elegido uno de los colores, el AZUL y hemos echado una gota de esa pintura en la paleta. Después ha elegido utilizar el MAGENTA y hemos echado otra gota en la paleta, al ladito del azul y los ha mezclado con el pincel y…. TACHAAANNN ¡hemos conseguido el color MORADO! ¡A la primera!.
Por ello en un folio en el que había dibujado un grano de uva enorme, hemos echado una gota de tempera magenta y otra azul y con el pincel las hemos mezclado hasta que hemos coloreado el grano de uva al completo.
Han quedado unos granos de uva preciosos con distintas tonalidades de morado y el lunes, cuando se hayan secado los recortaremos para poder formar nuestro gran racimo.